¡TU LLANTO,ANCIANA MÍA!

¡Dolor,amargura! asoman en las comisuras de tu boca
¡insensible frío! hace trizas tu corazón herido
¡Tu vieja barca se hunde! en monótonos vacíos
¡Tu llanto se dispersa! en pentagrama de melancolías
¡Anciana mía!
consagraste tu vida sobre un altar de barro sobre una imperfección casi perfecta.
¡Flotan querida anciana! aromas de atardeceres adormecidos
tu llanto agoniza sumiso...
agobiada se inclina, en el pobre ocaso
¡Oh señora mía! palpitan por tus venas,
¡sangre impetuosa,secretas emociones! Hilvanaste tu sacrificada lucha
¡con agujas de viento! en la ausencia del pan
¡vivificaste la esperanza! para alimentar un mundo
en el cual creíste.
Mantel extendido sobre la vieja mesa en espera de aquellos que tanto amaste
¡agua clara sobre ella rezuma tu tristeza!
¡Suena la sonata de un grillo! sumergido en la sombra de la noche
Bajo la austera luz de luna
tus recuerdos...
¡trepan espirales sin escalas! en la complicidad de faroles
de viejas calles olvidadas.
¡Se oye el vivificante,entristecido llanto!
¡de tu bendita alma...anciana mía!
en espera de los que nunca llegan...

¡y de ti, se han olvidado!